La Corporación Nuestro Hogar de Concepción está llevando a cabo un proyecto que busca ayudar a las niñas, niños y adolescentes con cáncer en una iniciativa que asiste tanto a los pacientes oncopediátricos como a sus cuidadores y a la familia más cercana, desde una nueva mirada integral que recoja los aspectos fundamentales del ser humano.
Nuestro Hogar es una casa de acogida para pacientes oncopediátricos y sus familias que cuenta con más dos décadas de funcionamiento. La “Casita”, nombre que se ha ganado con el paso de los años, busca dar una mejor calidad de vida a los niños, niñas y adolescentes que pasan por esta condición. Sumado a eso, cuenta con un equipo multifuncional de profesionales de la salud, entre otros, que acompañan a las familias desde la educación hasta el esparcimiento.
El enfrentarse a una situación así no es fácil, mucho menos con una pandemia. Es por esto que en la Corporación, Massiel Sanhueza, enfermera y terapeuta de medicina integrativa, encabeza un proyecto que tiene como principal objetivo “fortalecer y aportar una intervención desde una mirada integrativa de lógica biológica, social, emocional y psicológica, tanto para el paciente pediátrico como para su cuidador principal y familia”, según cuenta la profesional.
Proyecto
Pero, ¿qué es una mirada integrativa? Sanhueza lo define como un esfuerzo por poder abordar todos los ámbitos en los que se puede desenvolver el humano de tal forma que se pueda abarcar un gran abanico de soluciones transversales, en este caso, para los pacientes oncológicos de pediatría del Hospital Regional del Bío-Bío y sus familias. “El abordaje integrativo viene orientado desde la medicina integrativa, cómo esta ve al ser humano y la idea es ver a este desde todas las aristas: la parte psicológica, emocional, el cuerpo físico, como conectamos como el medio ambiente”, explica la coordinadora.
De esta forma, el proyecto, que ya lleva cuatro meses de funcionamiento, ofrece talleres educativos y de esparcimiento para los pacientes de oncología pediátrica y sus familias tales como yoga, reciclaje en casa, compostaje, educación nutricional, seguimiento psicológico, entre otros.
Para esto, la Corporación cuenta con una psicóloga y un psicólogo (uno enfocado al área infantil y la otra a la parte educativa), dos nutricionistas , tres enfermeras encargadas de los cuidados y herramientas para atender la enfermedad en el hogar, dos terapeutas ocupacionales, una para aspectos educativos en su área clínica y otra para el taller de yoga, un médico especializado en el área, una ingeniera medioambiental que lidera talleres de educación sobre su área, una periodista encargada de la relación con el medio y una persona a cargo de la gestión en agenda para los tratamientos psicológicos.
Todo lo anterior es un esfuerzo colaborativo que intenta responder a la mirada integrativa del proyecto liderado por Massiel, quien además colabora con el taller de yoga y cuya expectativa del proyecto ella define como “hacer un aporte bajo un diagnóstico complejo y también en un periodo de pandemia que implica mayores cuidados, mayores restricciones aliviando un poquito la carga que se siente en una situación así”, recalca.
Bajo esta misma línea, Claudio Cortés, Presidente de la Corporación Nuestro Hogar, hace hincapié en que “es importante que la labor social que cumple nuestra casita se desarrolle con un equipo de profesionales multidisciplinario y sea reconocido por la comunidad”. Así mismo agrega que “el trabajo mancomunado” con el hospital regional ha logrado fortalecer la corporación y el proyecto en sí y que buscan estar a la altura de lo requerido por las y los niños, niñas y adolescentes con cáncer y así poder otorgarles una mejor calidad de vida en el proceso médico.
Cortés también comenta que este proyecto es uno más entre los que planean hacer para seguir apoyando a las familias y sus hijos ya que están en constante búsqueda de instituciones que puedan financiar la corporación y así poder seguir beneficiando a “niños, niñas, adolescentes, padres y madres con la acción directa de profesiones de distintos ámbitos cuya finalidad es educar, empoderar y capacitar en el entorno Oncopediátrico”.
Finalmente, el proyecto logró una extensión en el plazo de su ejecución con motivo de la pandemia ya que se busca ampliar los talleres presenciales para la primavera con el fin de disminuir los factores de riesgo durante el periodo de otoño-invierno. Sin embargo, el apoyo integral de psicología, enfermería, medicina integrativa, nutrición y educación siguen activos con los talleres y atención online para que las mamás y papás sigan trabajando con la Corporación y los profesionales de la salud en directo beneficio para los niñas, niñas y adolescentes en la batalla que valientemente dan.